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Maximizar la seguridad de los aeródromos: ¿Con qué frecuencia debe barrer los FOD?

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Los aeródromos son una parte fundamental del sector de la aviación, por lo que es esencial garantizar su máxima seguridad.

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Una de las formas más eficaces de hacerlo es barrer periódicamente las zonas de operaciones de las aeronaves para eliminar los restos de objetos extraños (FOD). La prevención y la eliminación de FOD son esenciales para garantizar la seguridad y la eficacia de las operaciones aéreas. Los FOD pueden dañar componentes vitales de la aeronave, lo que provoca reparaciones costosas, retrasos y mantenimiento no programado. También pueden provocar accidentes peligrosos y potencialmente mortales, especialmente en el caso de ingestiones de motores.

La prevención y la eliminación de los FOD se consideran a menudo como "un coste necesario". Sin embargo, dado que contribuyen a reducir los costes operativos del lado aire, deberían considerarse una inversión. Al eliminar los FOD del aeródromo mediante sistemas de barrido eficientes y eficaces, los aeropuertos pueden reducir el tiempo y los recursos necesarios para el mantenimiento y las reparaciones. Unas prácticas adecuadas de eliminación de FOD también contribuyen a reducir los costes operativos y a mejorar la eficacia general de las operaciones en la zona de operaciones. Pero, ¿con qué frecuencia deben barrerse los aeródromos y qué otras medidas pueden adoptarse para maximizar su seguridad? En este artículo, analizaremos la importancia del barrido de aeródromos, la frecuencia con la que debe barrer su aeródromo y el papel de la barredora de aeródromos FOD*BOSS.